El seguro se basa en el principio del mutualismo, por el cual es posible estimar que un grupo de asegurados, al estar expuestos a los mismos riesgos, producirá un determinado número de eventos (los siniestros), calculados en términos estadísticos y cubiertos por la póliza.Sus condiciones están definidas por un contrato formalizado en un documento (la póliza), que tiene como objetivo garantizar la protección a una persona (el asegurado) cuando está expuesta a ciertos eventos inciertos (el riesgo).
Dicha protección se adquiere mediante el pago anticipado de una cantidad (la prima) al asegurador, quien se obliga a indemnizar al asegurado en caso de siniestro, de acuerdo con las condiciones estipuladas en la póliza.